Salgalú TV

La literatura infantil y la narrativa tienen múltiples beneficios para los niños. Al estar en una etapa de formación, desarrolla su personalidad y la curiosidad, además de la imaginación y la creatividad. También mejora la comprensión lectora y disminuye los problemas de concentración.

En la reciente edición del programa La Primera Infancia Primero de Salgalú Tv, la escritora Carlota Flores y la cuentacuentos Maite Cortez añadieron otras razones para que los padres incluyan estas artes en la formación de sus hijos.

Según De Flores, la literatura infantil permite crear arquetipos y símbolos que conmueven a los niños y les persuade a tener conductas y actitudes positivas, además de crear mensajes tan intensos que se mantienen a lo largo del tiempo.

“Solo la lectura te puede ayudar a pasar el espacio terrible de la ignorancia, la violencia y la injusticia, porque te comunica valores que luego asimilan. Lo más hermoso que nos puede pasar en el Perú es que nuestros niños interioricen valores de justicia, respeto, honor, solidaridad y buena compasión con los demás”, sostuvo la escritora.

“Los papas deben recordar que leer es una acto empírico, porque cuando yo leo me apropio del léxico, de las ideas y del punto de vista de la realidad del autor (…). Mi mundo va creciendo con la perspectiva de otros”, añade De Florez.

La escritora considera además que los padres deben inculcar en sus hijos y nietos el gusto por la lectura permanente y no esporádica.

Por su parte, la cuentacuentos y terapeuta de artes expresivas Maite Cortez indicó que la narración de cuentos sirve como una herramienta que tienen los adultos para acompañar su proceso de aprendizaje de una mejor manera y que, por esa razón, suele incluirlos en sus dinámicas.

“Me siento mediadora, de esa palabra, de esa mirada al otro, de esa sensorialidad, de esa sonrisa y de esa energía que nos une. Desde ahí podemos conectar”, explicó la cuentacuentos.

Cortez también destacó la importancia de enfocarse en mejorar la experiencia del niño, de acuerdo a sus gustos y comodidad.

“Pensaba en que antes de leer deberían ver el movimiento ocular y cómo esto, al momento de revisar un libro, no genere cansancio o sueño”, explicó la cuentacuentos y terapeuta de artes expresivas.