Salgalú TV

Los índices de anemia en menores de tres años se redujeron de 31.4 % a 7.2 % en esta región.

Logro importante. En solo seis meses la región Piura logró reducir 24 puntos porcentuales de anemia infantil leve en nueve distritos que se encontraban en situación de emergencia.

Son 124 menores de tres años que dejaron de padecer este mal que a nivel nacional afecta a casi la mitad de la población infantil.

Sobre este logro, el director del Banco de Alimentos, Salomon Lerner Ghitis, habló sobre el trabajo emprendido desde el sector privado para el desarrollo de la infancia.

“Durante los hechos ocurridos en país por el fenómeno del Niño Costero, nos vinculamos en ayudar específicamente en la región de Piura, donde nos dimos cuenta de la problemática de anemia y desnutrición en niños menores. Así, nos unimos a este proyecto y poco después logramos que continúe con Inversión en la Infancia, en el que se logró que 1 200 niños de nueve distritos sean los beneficiados con uno de los productos que combate la anemia como es la papilla”, comentó Lerner Ghitis en el programa Experiencias que valen la pena conocer de Salgalú Tv.

En ese sentido, dijo que esta reducción considerable fue gracias al trabajo que se hizo desde el liderazgo de las autoridades en Piura –gobierno regional que seguía un planteamiento desde hace cuatro años y que debía continuar–, y un sistema de gobierno donde había 150 promotoras familiares que todos los días iban a los domicilios de las familias para dar asistencia alimenticia

“Estas promotoras no solo hacían que se alimente el niño, sino también que reciban aprecio y cariño. También verificaban que los alimentos sean adoptados en el uso familiar, donde se trabajaba con los padres de familia para que conozcan el grado de malestar que puede causar esta patología, junto con las acciones periódicas por parte de los médicos”, explicó el exprimer presidente de Consejo de Ministros.

En esa línea, Lerner puntualizó que el liderazgo del gobierno regional y los planes de presupuesto ha sido factor fundamental para luchar contra esta afección, puesto que se ha priorizado en el valor del ser humano. “El enfoque de invertir en seres humanos ha permitido que hayan buenos resultados en este proyecto”.

Y es que este importante resultado se da en el marco de un proyecto sobre seguridad alimentaria, que fue desarrollado por el Gobierno regional de Piura en coordinación con Inversión en la Infancia y el Banco de Alimentos; y con el apoyo de Save the Children y la Fundación Bernard van Leer de Holanda.

Sobre el trabajo de estas organizaciones internacionales, aseveró que su presencia ha sido y es fundamental porque no solo están involucradas en temas de salud, sino en protección ante actos como de violencia. “Estas entidades han hecho un trabajo muy importante en lo que respecta a educación, salud, violencia; cual además nos han dado un marco que ayudado a mejorar todo nuestro trabajo interno que consistió en nutrir y sacar de la anemia a cientos de peruanos”, manifestó.

Asimismo, los distritos de intervención de este proyecto fueron Sicchez, Montero, Santo Domingo, Santa Catalina de Mossa, Buenos Aires, La Matanza, Tambogrande, El Tallán y San Miguel de El Faique.

Otro importante resultado de este proyecto es la disminución en 11.2 puntos porcentuales (de 11.7 % a 0.5 %) de la anemia moderada. En consecuencia, 57 niños dejaron de padecerla.

Además, en cuanto a desnutrición crónica, se disminuyó en 5 puntos porcentuales, pasando de 39.1 % a 34.2 %. Al inicio de esta intervención, 208 niños tenían desnutrición; pero luego de 6 meses, esta cifra se redujo a 182. Tanto en los distritos de La Matanza y Santo Domingo se tuvo un mayor impacto en niños de uno a dos años reflejado en mayores cifras de reducción.

En ambos casos (reducción de la anemia y desnutrición crónica), la mayor parte de los niños recibió papilla nutricional entre 81 y 110 días.

Respecto a esta experiencia, Lerner Ghitis indicó que puede ser replicable en otros lugares del país donde el producto (alimento) se puede adaptar a la zona donde existen otros alimentos. “Se puede hacer la papilla con el plátano (productos orgánicos de zonas como Piura) o con otras frutas originarias”, resaltó Lerner, quien además dejó entrever que no existe la necesidad de importar desde el extranjero.

Cabe señalar que el Banco de Alimentos viene ayudando con productos alimentarios a distintas organizaciones benéficas para ser distribuidas en familias que carecen de recursos y servicios básicos.